Me sofoco ante la burda idea de lo que quise alguna vez, y en mi cabeza un ruido infernal dispuesto a enloquecerme. Mi voz se quiebra y mi garganta arde al intentar pronunciar las palabras de este Adios. Mis dedos luchan al escribir mil veces 'no debo recordarte'. Mis brazos, incrédulos, solo quieren abrazarte. Y no puedo, no quiero, no debo... Pero sobre todo, no tengo una estupida razón para olvidarte.

6 comentarios:

  1. Si te digo que me siento UN POCO identificada con este texto... me quedo corta.

    ResponderEliminar
  2. amoo a tu bichooo (perro).. y en el caso de que llegaras a encontrar una razón para olvidar, contame cual haber si me sirve a mi también :s

    ResponderEliminar
  3. Una razón quizás válida es NO FUNCIONÓ
    Un beso mau con queso :) jaja ♥

    ResponderEliminar
  4. Cuando las historias terminan bien pero terminan, es una garcha (perdon mi sinceridad)
    Pero bueno.. dejarlas atrás como un recuerdo que te roba una sonrisa es la que queda.-
    O seguis o te estancas.. =/

    No sabes como te entiendo U_U

    Saludos para voce!

    ResponderEliminar
  5. Todos nos hemos podido llegar a sentir así en alguna ocasión de nuestras vidas. Gracias por transmitirlo. te sigo, buen blog

    ResponderEliminar